Descripción
CHEESECAKE – 432 Portadas De LPs De Todo El Mundo – En Inglés
Con las imágenes de Portada, contraportada, etiquetas cara A y B y títulos de las canciones de cada disco.
2023 (TC Books)
COLECCIÓN COMPLETA – 1 Tomo – 432 Páginas.
432 Portadas de Discos de Vinilo LP’s de todo el mundo de 1947 a 2016. 432 Fotografías de bellezones que fueron protagonistas de las portadas de cantidad de discos.
Pero analicemos el término “Cheesecake”.La historia de la música popular está repleta de anécdotas y curiosidades que han contribuido a su evolución y desarrollo. Uno de esos elementos que ha dejado su huella en la cultura musical es el término “cheesecake” (pastelito de queso), el cual se utilizaba para describir las portadas de discos de vinilo que presentaban a mujeres ligeras de ropa en los años 40. Esta práctica no solo influyó en la comercialización de la música, sino que también se convirtió en un fenómeno cultural que marcó una época.
El Surgimiento de las Portadas “Cheesecake”
El término “cheesecake” se popularizó en la década de 1940 en los Estados Unidos, aunque sus raíces se pueden rastrear hasta antes de esa época. La expresión “cheesecake” se utilizaba originalmente para referirse a fotografías de mujeres con un enfoque en su atractivo físico, especialmente las imágenes que enfatizaban las curvas y la sensualidad. Estas imágenes eran frecuentemente usadas en revistas, calendarios y, posteriormente, en las portadas de los discos de vinilo.
La Era de Oro del “Cheesecake” en las Portadas de Vinilos
El auge de las portadas “cheesecake” en los discos de vinilo se dio principalmente en la década de 1940 y continuó en la década de 1950. Este período coincide con el apogeo de la música pop y jazz, y las discográficas se dieron cuenta de que la inclusión de imágenes sugerentes de mujeres en las portadas podía aumentar las ventas de los discos. Estas portadas a menudo presentaban a modelos o actrices en poses provocativas, vestidas con trajes de baño o lencería.
El Uso de “Cheesecake” como Estrategia de Marketing
La estrategia detrás de estas portadas “cheesecake” era clara: atraer la atención de los compradores y, en su mayoría, de un público masculino. La idea era que las portadas provocativas generaran curiosidad y deseo, lo que llevaría a los consumidores a comprar el disco. Esta táctica de marketing se basaba en la noción de que la sensualidad y la atracción física podían ser poderosas herramientas de venta.
El Legado del “Cheesecake” en la Música
A pesar de su popularidad en su momento, el uso de portadas “cheesecake” en los discos de vinilo eventualmente disminuyó a medida que evolucionaron las normas culturales y la sensibilidad hacia la representación de género en los medios. Las portadas de los discos comenzaron a centrarse más en la música y los artistas en lugar de en imágenes provocativas.
Sin embargo, el término “cheesecake” sigue siendo parte de la historia de la música, recordándonos una época en la que la sensualidad y el marketing se entrelazaron en la industria musical. Aunque la práctica en sí puede parecer hoy en día un tanto sexista y objetificante, es importante recordar que refleja una época y una mentalidad específicas.
En resumen, las portadas “cheesecake” en los discos de vinilo de los años 40 y 50 son un recordatorio de cómo la música y la cultura popular han evolucionado a lo largo del tiempo, y cómo las estrategias de marketing han jugado un papel fundamental en la promoción de la música. Aunque pueden ser polémicas desde la perspectiva actual, estas portadas son una parte interesante y controvertida de la historia de la música.
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